El cocinero Fermí Puig, que fue a las listas de Junts per Catalunya en las elecciones del 21-D, ha criticado al Govern por el cierre de la restauración como medida para evitar la proliferación del patógeno.
Puig, que afirmó en un vídeo promocional de campaña electoral que "JxCat era la lista que medio país deseaba" y a la que la definió como "una lista proyectada al futuro e ilusionante" participó este martes en un encuentro con 80 restauradores para exigir al Govern la apertura de restaurantes.
"Soy uno de tantos catalanes que ya hace tiempo descubrió que no podía vivir en plenitud su catalanidad dentro de España" explicaba el chef en el vídeo electoral de JxCat. "Estoy en la lista por dos razones: porque el presidente me lo pidió y porque dentro de un tiempo nos hemos de poder reconocer pensando que en estas horas difíciles estuvimos allí donde correspondía".
"Junts per Catalunya es lo que tanta gente hemos vivido durante tanto tiempo a las manifestaciones" dijo. "Es una lista unitaria, transversal y una lista proyectada al futuro, ilusionante y que a mí me ofrece esperanza" concluyó.
"Tenemos medidas de país rico con recursos de país pobre, podemos ir a la ruina en cuestión de días" advirtió en cambio este martes el chef, que fue uno de los muchos restauradores que se reunió el martes en un acto reivindicativo junto con los principales chefs de Barcelona y empresarios del sector. "Lo importante es abrir ya, porque hay miles de trabajadores al borde de la miseria" ha alertado.
Los restauradores advirtieron que una prórroga de las medidas de restricción para otros quince días más acabaría hundiendo al sector y abocando a su desaparición y reclamaron al Govern una reunión para "consensuar las condiciones mínimas" para poder reabrir los establecimientos.
El chef, que se encarga de un restaurante en Barcelona que lleva su nombre, ya criticó el pasado 19 de octubre en una entrevista en Rac1 la medida del Govern manifestando que "han arruinado a todo un sector".
El cocinero manifestó que "lo han hecho mal, desconocen absolutamente el sector". "Esta es una medida terrible que no afectará sólo a las empresas que de una manera directa lo sufrimos", y avisó que "los proveedores serán los que recibirán más".
Fermí Puig acusó al Ejecutivo catalán de haber provocado "la práctica ruina". "Esto es una decisión política. Han abocado prácticamente al pacto del hambre todo un sector que ha hecho las cosas razonablemente bien, la han arruinado", sentenció. "El gobernante tiene la obligación de compensar el daño que hace", reclamó.