La sequía se está acentuando en Cataluña durante las últimas semanas provocada por la falta de precipitaciones desde hace meses que ahora afectan ya a las reservas de agua. Sin embargo, la portavoz del Govern, Patrícia Plaja, aseguró hace dos semanas que "no debemos alarmarnos" y explicaba que el Goverm no descartaba que "a finales de agosto una parte importante del territorio se encuentre en situación de alerta por sequía".
Las previsiones que presentaba Plaja se han adelantado y esta semana se ha declarado la alerta hidrológica en 135 municipios de la parte alta del Ter, en el tramo medio del Llobregat y en el sector del Anoia-Gaià. En total, está activada la alerta por sequía en 150 municipios.
Ya han llegado las primeras restricciones a la agricultura, a la ganadería ya la industria, que podrían alargarse hasta finales de septiembre, según ha explicado la consellera de Acción Climática, Alimentación y Agenda Rural, Teresa Jordà. Además en el ámbito particular se ha establecido un límite de 250 litros por persona y prohibiciones de llenar una piscina o regar la calle con agua del grifo.
Ahora mismo el nivel de los embalses se encuentra en torno al 43% y hace sólo tres semanas que se bajó del 50%. La mayoría de los pantanos se encuentran en niveles muy inferiores respecto al porcentaje de agua que tenían un año atrás.
Por ejemplo, el pantano de Susqueda está en un 49% cuando hace un año se encontraba en casi un 88%. Lo mismo sucede en otros pantanos como el de Canelles que en estos momentos no llega al 38%, mientras hace un año superaba el 76% de su capacidad.
Durante los últimos días han tenido lugar en Cataluña algunas lluvias fuertes, sin embargo han sido tormentas bastante localizadas, en muchos casos próximas a la costa y no a puntos de las cabeceras de ríos, por tanto, no se prevé que cambien notablemente la situación.