El Tribunal de Cuentas ha fiscalizado los más de 416 millones de euros que la Generalitat destinó a políticas en el extranjero entre 2011 y 2017, es decir, en mandatos de Artur Mas y Carles Puigdemont y, según informa TV3, que ha tenido acceso al informe; el tribunal reclamará más de cinco millones de euros a la treintena de personas investigadas por supuesta responsabilidad contable.
El órgano fiscalizador considera "gasto legal" el dinero destinado a "la proyección de Cataluña o la promoción de los intereses del conjunto de Cataluña en el exterior", pero, en cambio, el dinero público utilizado para "promocionar, publicitar, justificar, promover o impulsar el proceso soberanista ", de acuerdo con el tribunal, no están justificados, porque quedan fuera de sus competencias.
El informe recoge 45 viajes oficiales de Mas, Puigdemont y sus consejeros, que tuvo un coste total de 479.633,38 euros, y remarca que "estos viajes tenían el objetivo de obtener el apoyo y el reconocimiento internacionales, violando la lealtad institucional "con el Estado español.
También califica de "diplomacia académica" actividades que tenían el objetivo, a su juicio, de "dar prestigio al proceso soberanista entre la comunidad científica y animar a los principales expertos internacionales a estudiar y a publicar sobre Cataluña". Con este criterio, considera ilegal el gasto destinado a 72 actos, por un valor total de 382.628,14 euros.
Otros gastos que recoge el informe son 112.237,04 euros en 25 reuniones de "diplomacia parlamentaria"; 460.986,44 euros en 23 visitas internacionales del Diplocat; o 308.530,29 euros en estudios encargados por este último organismo.