Unas 5.000 personas, de las cuales un tercio son menores, han entrado en Ceuta, según la Delegación del Gobierno en la ciudad. La mayoría de estas personas han conseguido entrar a nado.
Cientos de personas seguían dirigiéndose este lunes por la noche desde la localidad marroquí de Fnideq (Castillejos) hacia Ceuta para tratar de cruzar hacia la ciudad española, en una ola imparable que duró toda la jornada y se prolongaba durante la madrugada de este martes.
La delegación ha cifrado que unas 1000 personas, de las que al menos 300 son menores de edad, han conseguido sortear los espigones que separan los dos lados de las frontera, tanto en la bahía sur, en el paso del Tarajal y en la bahía norte, en la playa de Benzú.
La guardia civil los ha trasladado en grupos hasta las naves del polígono industrial donde tiene el dispositivo de acogida de migrantes para hacer cumplir los protocolos sanitarios para evitar contagios de COVID 19.
Familias enteras con niños, jóvenes, pero sobre todo muchos menores de edad no acompañados, además de un número menor de subsaharianos, todos se dirigían hacia la frontera con Ceuta con el objetivo de atravesar hacia el lado español ante el escaso control de las fuerzas de seguridad marroquíes.
