El secretario de Salud Pública, José Maria Argimon, ha defendido el plan de vacunación y ha calificado de "ridículo" que el TSJC haya dado un plazo de diez días para vacunar agentes de la Policía Nacional y la Guardia Civil y alcanzar el mismo nivel de vacunación que los Mossos d'Esquadra.
Argimon ha asegurado que "no discriminamos nunca, ni por razones de edad ni de género ni de creencia ni de nada. Me da igual si es un mozo o un guardia civil". "Me importa un rábano cuál es la profesión que tienen", ha sentenciado en rueda de prensa.
El secretario de Salud Pública ha reivindicado su papel como médico y ha remarcado que "nos han formado para dar cuidado y asistencia a todo el mundo". Después ha explicado que se vacuna a todo el mundo que está en el listado facilitado, pero recuerda que hubo una "parada cautelar" -en referencia a la suspensión de AstraZeneca- que frenó la vacunación de estos colectivos.
"Cuarto punto: ¿nosotros hemos politizado este asunto? No. Se habrá politizado desde Madrid. Y rápidamente se ha judicializado", ha lamentado Josep Maria Argimon, y ha subrayado que "bastante complicado es todo" por "tener que atender ahora a criterios judiciales". "El criterio judicial de llegar a la cobertura de los Mossos es ridículo", ha remachado .
Finalmente, se ha preguntado si deberá pedir al ministerio o la justicia qué dosis debe poner a los agentes: "Aquí quien opina son los jueces. Quizás preguntaré al juez en Pfizer, Moderna o Janssen. No lo sé". "Todo es bastante complicado para politizar o judicializar", ha concluido Argimon, que ha pedido que "quien lo ha politizado, que lo resuelva".
