Tenía pendiente la entrevista con Jordi Cabanes, director de la escuela Abad Oliba-Spínola del barrio barcelonés del Guinardó, desde hace más de un año. Como entrevisté recientemente al historiador Luis Togores, que fue profesor suyo, he acelerado el proceso.
Hemos hecho un repaso de la educación porque yo estoy convencido de que hasta que no cambiemos el chip -recuperar aquello de la cultura del esfuerzo- no saldremos del pozo. Y, efectivamente, advierte de que las sucesivas leyes de educación "han reducido el nivel de exigencia".
"Ahora pretenden que, pobrecitos, no les suspendamos". "No suspender a un alumno es absurdo", insiste. También admite, ante las acusaciones de "adoctrinamiento", que "la escuela no es neutral" y que "no se debería utilizar como instrumento". Finalmente reconoce que "tendríamos que hacer inmersión en castellano en algunos lugares donde los alumnos tienen la tele o internet como fuente".
Una entrevista de Xavier Rius/